Ese amontonamiento de distancias,
caídas desde todas las alturas
en tu cuerpo convergen y en mi cuerpo,
como en arenas lánguidas y oscuras.
Como en arenas, pinceladas negras,
nos hunden en deseos y lascivias,
hendiduras de sombras en pétalos de gozos
de pimpollos latientes y ansiedades anfibias.
Desnudándote estoy entre palabras
Y en los flancos que mueven los suspiros
meten palmas mis blancos y abren paso
a imaginarios besos y pesos compartidos.
Ahondándonos los dos, íntimamente,
en una confidencia de líneas y de atajos
los cuerpos se amalgaman y se hacen luz de luna
infligiéndose entrambos cosquillas como tajos.
Amarnos en ausencia, componer el dibujo,
la complexión exacta de trazos y colores
y sentirnos heridos, en llamas o entre hielos,
por la pasión transidos, henchidos de temblores.
Amilcar Luis Blanco
(Egon Schiele- "El abrazo")
"Por la pasión transidos, henchidos de temblores."Qué bien describen tus versos el amor en la distancia, querido Amílcar.
ResponderBorrarSi me lo dices tú, querida amiga Mayte, gran poeta, entonces seguramente logré describir el tema del amor en la distancia, gracias.
ResponderBorrarBesos.