Sólo soy un disfraz, una corteza,
a veces proyectado contra el fondo
de una pantalla hecha de tiempo. Un hondo
salón de cine sólo en mi cabeza.
Me miro en los recuerdos, en la aviesa
intrepidez de un episodio mondo
que trato de esconder y que no escondo
de tanta soledad que me atraviesa.
Exploro en mi memoria si me alejo
para ver de mi mismo lo que huía
más allá, al otro lado del espejo.
Descubrir que hay detrás de lo que había
de ese otro que no fue, pero quería
y que en mis sueños deja su reflejo.
Amílcar Luis Blanco ("El otro, el mismo", oleo sobre tela de Rodolfo Opazo)
Gracias por desafiarnos intelectualmente y motivarnos a aprender más a través de tu artículo. Obtén consejos y trucos sobre el juego Aviator en nuestro blog.
ResponderBorrar