Tanto día de sombras caminado a destajo
y por calles que acallan su cielo entre cenizas
vuelve los pasos lerdos y cigarrillo abajo
hace que nos fumemos el ánimo hecho trizas.
Tanta razón sin nadie descalabrando el seso,
cicatrices de rabia que talla la mentira
y repechar las penas, el temor y ese peso
de la angustia que ahueca y la angustia que tira.
Tanto doler el alma de invisible manera
vibrando cual campana cuando tañe el badajo
sintiendo al corazón latir como si fuera
partiéndose la vida en infinito tajo.
Amílcar Luis Blanco
y por calles que acallan su cielo entre cenizas
vuelve los pasos lerdos y cigarrillo abajo
hace que nos fumemos el ánimo hecho trizas.
Tanta razón sin nadie descalabrando el seso,
cicatrices de rabia que talla la mentira
y repechar las penas, el temor y ese peso
de la angustia que ahueca y la angustia que tira.
Tanto doler el alma de invisible manera
vibrando cual campana cuando tañe el badajo
sintiendo al corazón latir como si fuera
partiéndose la vida en infinito tajo.
Amílcar Luis Blanco
Amílcar querido, el poema es precioso y profundo, aunque triste, mi niño, se respira, se inhala la tristeza y ésta produce una contracción bronquial que impide oxigenarse el alma. Pues, ¿qué hay más triste que un alma compungida?
ResponderBorrarAlma doliente cuando vibra el badajo, que en su infinito repique, dobla por las almas rasgadas por penas de amores que no tienen cura.
Besos imposibles, Maestro.
¡Qué hermosísima metáfora pero que doliente realidad la de "besos imposibles"! Escribe un poema con ese título. Lo que en la realidad no se consigue a veces es posible de un extraño modo con la imaginación. Besos de amor imposible.
ResponderBorrarHola Amílcar, he llegado a tu blog como el viento, que hoy me seduce medio dando tumbos con su fuerza.
ResponderBorrarVeo que escribes precioso, quizás sea por la tristeza, yo también escribo mejor cuando en mi corazón habita y se queda una temporada el desamor, la melancolía de lo que fue, la incertidumbre de lo que será, pero así son las cosas.
Una entrada casi de otoño, pasare a verte… con tu permiso. Un saludo.
Querida Lola, sos bienvenida y lo que dices es cierto, pasaré también por tu blog a leer tus creaciones. Un saludo entretanto.
ResponderBorrarTanto de andar por las calles sin noches por los dias perdidos y con reproches...Mientras la luna nos mira y vos le guiñas un ojo
ResponderBorrarCuando la angustia se apodera de uno, puede llegar a sentirse un poco bajo de moral, y el alma llega a doler.
ResponderBorrarBellas tus letras, amigo.
Un beso.
Gracias, Mucha por tu comentario y tu visita. Me pasaré por tu blog a ver qué hay de nuevo ni bien pueda. Un beso
ResponderBorrarGracias, María. Es verdad el alma duele y la angustia tira. Un beso.
ResponderBorrarESCRIBIRÉ SOBRE BESOS IMPOSIBLES, MAESTRO, SERÁ PARA QUE ENSALZAR LOS AMORES QUE HABITAN TRAS LAS BRUMAS DE LOS BOSQUES...
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