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lunes, 11 de noviembre de 2013

METEJÓN III




Ando llevándote por todos lados
y no me gratifica en absoluto.
Que estés debajo de las horas,
muda, sin expresión incluso,
con tus ojos de brillo de laguna
consultándome.

Amo tu cabellera contagiada de noche,
el recuerdo de tus yemas y tus uñas
acariciando mi paciencia a punto de estallar
y ese cuerpo que se encabrita y amarillea
sobre mis costillas inflamadas de ocasos.

Ando siempre buscándote
porque tu ausencia me embriaga,
jamás me deja en paz y así la siento
como si me necesitara.
La ilusión de tu cuerpo contra el mío golpea
igual a una marea
y después se evapora dejándome la espuma de tu risa.

Acaso mi ternura se ha convertido en piedra
sin que yo lo advirtiera
y te hayas ido dejándome tu ausencia
porque sea más vasta, mas completa,
que tu fugaz presencia
y ahora seas de agua, de sales y de vientos.

Amilcar Luis Blanco  ("Mujer bonita pintada al oleo" por Omar Ortiz)




2 comentarios:

  1. ¿Acaso mi ternura se ha convertido en piedra? Qué hermoso poema y cuántas veces nos preguntamos eso mismo, cuando nuestra ternura no es valorada, no es aceptada, no es recogida.

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  2. "Y ahora seas de agua, de sales y de viento" Preciosos, logradísimos versos, donde se reivindica la ternura, Amilcar.

    Mi admiración y aplauso.

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