Viene desde tu angustia
tu sonrisa. Desde tu pena cruel.
Del campo de desgracia
hasta la blanca gracia.
Hay un dolor de amor.
Cae desde tu sonrisa;
una azucena abierta
defiende la alegría.
Desafía el invierno.
Parte la desazón
como una fruta
cascada y seca.
La blanca cerrazón
de verticales teclas;
alza su fortaleza
contra la impar tristeza.
Y me produce júbilo.
Ilumina. Es alba de la fe.
Porque sonríe el instinto
Y nos ama y comprende.
Amilcar Luis Blanco ("Mujer sonriendo" por Lucian Freud, pintura ejecutada con la técnica del empaste)
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