Aquí me busca solamente el río
La huella digital de la mañana
Aquí la seca arena y el rocío
Y la luz y la sombra soberana
Hunde su gloria el cielo y el hastío
Pudre sus flores de memoria urbana
Aquí me encuentro con el sol, confío
Que hablaré con el ángel que me gana
Y abriré una región de desvarío
O quizás de memoria sobrehumana.
De nuevo cae la sombra en el estío
La luz funde calor y resolana
Contra la arena, fulge en el vacío
Y en el silencio tañe una campana
AMILCAR BLANCO (Blog destinado preferentemente a la poesía propia) Los derechos de autor de lo publicado y a publicar en este blog están reservados y protegidos por la Dirección Nacional del derecho del autor-dependiente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la República Argentina- Expediente N° 933882
Seguidores
Translate
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Bellísimo soneto, querido Amilcar. Casi puedo saborear esa calma propia del campo y vislumbrar el desértico horizonte con el repiqueteo de la campana rasgando el silencio...
ResponderBorrarUn beso y mis mejores deseos para la recién comenzada semana.
Escuchando un tango argentino tuve ganas de ponerle letras.Con música de Piazzola violines... guitarra... y un piano sin cuerdas me sentí poeta. Y sin ser tu esclava rendirme a tu lado mientras me sentían tus manos abiertas .Al son de tu lengua lamiendo el silencio ,desde mis dedos hasta mis orejas. Sí mi cama está aún vacía esperando tu cuerpo desnudo... y mientras bailo a solas las letras te espero en silencio vestida sin velos.
ResponderBorrarGRacias Maite. Gracias Mucha, tu poema es hermoso
ResponderBorrar