Morir de amor ahora que tus ojos
van dentro del tañido de las cuerdas
de irascibles guitarras
y de la voz que canta
y del cuerpo del viento
y uno permanece contemplando
como tu ausencia cierra el horizonte.
Morir de amor en el lugar del hielo
Convertido en la brasa que se extingue
En la lágrima tibia detenida por siempre
prisionera salvaje del silencio y la nieve
sorprendida en la levedad de su caida
porque nunca previó que se apagara
el calor que tu llama le infundía
Morir de amor desfallecer opiarse
de una angustia bermeja
como el agua estancada
Aburrirse de ser porque no hay nadie
que acompañe el latir de nuestro paso
en esta soledad que nos inunda
sin darnos pretensión ni moraleja.
Morir de amor y sed insatisfecha
y nauseas y despechos encelados
distancias compromisos con el tiempo
amarguras obstáculos y trampas
y confundir las puertas y los nombres
y dejar al amor abandonado
cual si fuera un monstruoso minotauro
en el cruel laberinto del olvido.
Amílcar Luis Blanco("El guitarrista" Oleo de Alfonso Ferro)
Un poema que delata carencias y deseos de cambios.
ResponderBorrarLa vida es una constante búsqueda.
Besos, Amilcar.
Hermosísimo peoma Amilcar, besos, Ana.
ResponderBorrarAmilcar..." Morir de amor "
ResponderBorrarTus palabras lo dicen todo, se sufre, uno se deja morir de amor.
El tiempo pasa y nos decimos, ese amor quizàs no era para mi o porque nunca he llegado a ser felìz en el amor hasta concretar lo deseado..
Muy triste lo tuyo !!
un beso