Por pisar y sentir las resistencias
Contra las soledades y abandonos
Hago con mis tristezas y mis ciencias
Letras, palabras, frases, versos, tonos.
Y es una solitaria sed ausente
Esta pulsión celeste
Tanto impío arrabal
Tanta tristeza
Se desliza reptando
Por la calle sabuesa
Que mi pulsión celeste
Se hace agreste
Comezón que no cesa
Cual si un insecto burlador y turbio
Varias veces picara mi cabeza
Y es una solitaria sed ausente
Esta pulsión celeste
Voces acuden desde las orillas
Rotas conversaciones,
ayes, gritos,
Las veredas se pueblan, los balcones
Se hacen urgentes naves como quillas
Que naufragaran en nerviosos ritos
Y es un quehacer exhausto e impotente
De antemano
Para intentar saciar un apetito
Tan humano
Este querer versar a lo celeste
Humo de soledades,
Sucias, recalentadas,
Por fuegos de ilusiones
No saciadas.
Hombres, mujeres, entre sí, con hijos,
Medran en los suburbios sus pobrezas
Y golpean y rompen guitarras y entresijos
En todas mis inútiles destrezas
Y esta pulsión celeste absurda
Late
Adentro de mis venas y mi frente
Tan impotente y burda
Tan dislate
Como una sed ausente
Es decir una sed no dirigida
Es decir una sed desubicada
Porque no tiene objeto ni medida
Porque al crecer en mi sigue insaciada.
esta asturiana se quita el sombrero ante tu bellisima poesia con la cual nos deleitas, un besin
ResponderBorrarUna sed de justicia social te invade, mi muy querido Amílcar y es normal, hasta cierto punto, porque alguien que se dedica a tu profesión, si es vocacional, como así creo, ha de ser porque ansía la justicia y la libertad.
ResponderBorrarOjalá que pudiésemos cambiar el mundo, aun cuando poco a poco éste va cambiando a mejor, y eso que a veces sucede alguna que otra involución, algún indeseable retroceso, pero si con nuestras ansias, si con nuestras ganas, si con nuestras palabras y hasta con nuestros poemas o nuestras revoluciones, pudiéramos devolver la dignidad al mundo... No existiría nada más hermoso...
Me conmueve tu poesía, Amílcar, me conmueves tú, mi muy querido amigo. No cambies nunca, por favor. Te dejo un beso enorme y mis deseos para que este domingo sea estupendo y mi agradecimiento por todas tus lecturas y bellísimos e inmerecidamente halagüeños comentarios. Siento no disponer del tiempo suficiente para responderte, detalladamente, a todos y cada uno de ellos, pero que sepas que sí que los leo, porque me llegan al correo del blog, y que sepas también que aunque me han dedicado poemas muy hermosos, que guardo en lo más profundo de mi corazón, los tuyos también lo son, bellísimos, y también los atesoro en el mismo lugar, con llave de oro, mi querido amigo.
¡Muacksssssssssssss!!!
Gracias Ozna, Ozna, por tu amable comentario. Un beso
ResponderBorrarQuerida Mayte. Es cierto la justicia social y la equitativa distribución del ingreso son utopías que me gustaría que alguna vez se realizasen para bien de todos, de toda la humanidad que tanto sufre. Desgraciadamente nuestras vidas son cortas y suele siempre quedar trunca la posibilidad de nuestra mano, de nuestra inteligencia, voluntad o diligencia.
ResponderBorrarQuiero decirte que siento tu amor, que me llega, como algo cálido, cordial, positivo. Que me hace muy bien. Me transmitís mucha verdad y pasión en tu poesía pero también en tus comentarios. Me siento realmente estimado y apreciado por vos. Como además tengo una gran afinidad contigo, todo se va sumando. Quizá pienses que te idealizo, incluso lo has dicho en algún halagüeño comentario hacia mí. No es así, no te idealizo. Real y verdaderamente sos una buenísima persona, excelente y estoy orgulloso de haberme cruzado contigo, aunque sea en un soporte virtual como éste, en el que no tengo empacho en decirte cuánto te quiero yo también. Que seas mi amiga, que me dediques tu atención. Te peercibo siempre fiel a vos misma, auténtica, visceral y a la vez equilibrada, hermosa, en fin podría estar hablándote horas de tí misma y t darías cuenta que no te idealizao sino que percibo o advierto todo lo que me conquista y enamora de vos. Te quiero muchísimo, cada vez más.¡Muacksssssss!!!!
Yo también te quiero mucho, Amílcar, me has ganado el corazón, mi niño y me ruborizo con tantas alabanzas, jajaja, si soy una persona llenita de defectos, pero bueno, ésos se ven menos, jajaja.
ResponderBorrarBuenos días, que aquí son las 10,45 de la mañana y ya luzco una sonrisa de oreja a oreja, gracias a ti. Mil besos, ¡mil!
No nay nada peor que no sentirse realizado y pleno, querido amigo. No aguantes. No reprimas. Deja que vuelen tu corazón y tu deseo en pos de esa pulsión tuya que más te reclama y te seduce. No sientas culpas. No escuches convenciones. No te dejes atar por lo caduco y lo ya muerto. Tiene tu poema además, una riquísima cadencia rítmica, como una sabrosa batería de jazz improvisando al compás de un saxo y de un piano salpicado de licores... Tal vez un tango-jazz, una fusión maravillosa del arrabal macho con la negra seducción de las noches del sur norteamericano... Tengo el ritmo, la música en mi mente. Eres eminentemente musical, Amílcar. Abrazo fuerte y apretado, mientras sigue tocando el tango-jazz.
ResponderBorrarMayte, tesoro, si te he alegrado el día me doy por bien pagado, como en la canción. Miles de besos también para vos.
ResponderBorrar¡Queridísimo amigo Pedro! Aciertas en todo. En tu exhortación ante mis complejos de culpa y en lo que se refiere a la inspiración de ritmo y musicalidad que encontrás en mi poema. Soy amante devoto del jazz, el blues, el tango y toda la música rítmica y cadenciosa de nuestra América latina. Me gusta el grupo Mayumaná que hace percusión. Mi hijo mayor, Julián, que vive en España, en Madrid, tiene un conjunto y él hace percusión. Un fuerte abrazo para tí, Pedro querido!!
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